246 – Sierra de Cantabria. (Lagrán - Álava)

Ruta realizada: Domingo, 07 de Junio de 2.015

Itinerario lineal:

Lagrán – Puerto Lagrán – Cruz del Castillo – Larrasa – Palomares – Fte. Laciturri - Recilla – Cervera – Artesilla –  Mendegorri – Castillo de Vallehermosa – Eskamelo – Puerto de Herrera.

                                       Al fondo: Cruz del Castillo y Larrasa (Sierra de Cantabria)

Enrike Arnáiz, Elías y Javier.

            En esta ocasión Enrike Arnáiz nos sugiere una propuesta interesante con recorrido casi integral de la Sierra de Cantabria en la provincia de Álava. Nos juntamos en el puerto de la Herrera donde queda uno de los coches pues se trata de un trazado lineal. Aquí en el puerto finalizaremos la ruta mientras que el comienzo lo hacemos de la pista que sale del pueblo de Lagrán en dirección al puerto de Lagrán (1,5 km desde el pueblo).

            Dejamos el coche orillado en la pista (alt 850m) y ya andando seguimos por buen camino señalizado con las marcas GR-38 que alcanza el puerto de Lagrán y pasa a la otra vertiente de la Sierra de Cantabria hacia Laguardia. Además de las marcas podemos ver otros indicadores, incluso tablillas con escritos alusivos a la producción de carbón vegetal en la zona así como del uso dado a esta ruta de comunicación entre valles.

            Nos espera un día de mucho calor y de momento podemos agradecer que el camino hasta el  puerto de Lagrán (o del Toro) sea bajo la buena sombra del fresco hayedo entre el que se intercalan abundantes ejemplares de boj. En el mencionado puerto (1207m) abandonamos el itinerario del GR y tomamos la senda señalizada que hacia la derecha se abre paso entre el espeso bosque de boj y hayedo conduciéndonos a la Cruz del Castillo. Esta ascensión parece ser muy frecuentada viendo el desgaste del trazado de la senda que alcanza un pequeño collado (1404m). Desde éste, continúa hacia la derecha en empinada ascensión pero sin dificultad hasta alcanzar la gran cruz de hierro que identifica la montaña.

            La cima Cruz del Castillo (1431m) es una magnífica atalaya con vistas excepcionales tanto hacia los extensos terrenos y poblaciones del Sur con Laguardia y Elciego entre otros, como hacia el Norte donde se encuentran Lagrán y Pipaón. Un hueco cuadrado excavado en la roca parece que en la antigüedad albergó una torre quizá de vigilancia sobre el puerto de Lagrán. Disfrutamos unos momentos con las panorámicas que hacia el Este nos muestran la continuidad de la Sierra donde se encuentran Peña León y San Tirso, mientras que hacia el Oeste es la cercana peña Larrasa que ascenderemos seguidamente.

            Regresamos al pequeño collado y todavía continuamos en leve descenso por la ladera Norte para enseguida elevarnos entre hierba y roca siguiendo una estrecha senda por la empinada ladera que supera una canal terrosa. A continuación se interpone una corta chimenea abierta en la roca que obliga trepar, no siendo excesivamente complicado superar esta dificultad pues se encuentran buenos apoyos para pies y agarres para las manos. Luego ya se anda más cómodo hasta situarnos sobre el punto más elevado de esta cumbre Larrasa, (La Rasa) (1.449m).

            Destrepamos por el mismo trazado de subida y a continuación seguimos la senda que en descenso por la ladera Norte salva los escarpes del perfil rocoso de la Sierra. La senda es variada y entretenida conduciéndonos hasta una brecha por la que hay que cruzar a la vertiente Sur. Descendemos unos 60 mts por una estrecha y empinada canal con algunos destrepes no muy complicados de roca. Desde la base de esta canal la senda remonta entre cascajo una inclinada ladera alcanzando un pequeño collado para pasar de nuevo a la vertiente Norte, bordeando de esta manera algunas de las torres del cresterío. El trazado de la estrecha senda nos va conduciendo perfectamente y nos eleva de nuevo al espectacular perfil de la cresta por la que seguimos avanzando hasta la base rocosa de la peña Palomares. Trepamos unos sencillos tramos de roca y finalmente nos situamos sobre la cumbre Palomares (1443m) que ofrece unas vistas excepcionales hacia el cordal de la Sierra, tanto en uno como en otro sentido, así como hacia las llanuras de los valles contiguos.

            Qué bonita es esta Sierra de Cantabria. Todavía tenemos numerosas sorpresas y más cumbres que añadir en este largo itinerario. De momento lo estamos disfrutando y seguro que así seguiremos hasta finalizar el recorrido en el Puerto de Herrera.
            Descendemos de Palomares siguiendo la senda por la vertiente Norte entre abundante bosque de boj y de hayedo. Se agradece su frescura en este día caluroso. Perdiendo bastante desnivel, el camino nos lleva a pasar junto a la fuente Laziturri (1021m) donde decidimos hacer la parada larga del día para alimentarnos y descansar bajo la sombra del hayedo. Esta fuente así como otros manantiales en la ladera Norte de la Sierra de Cantabria contribuyen al nacimiento del río Ega.

            Después del reconfortable descanso y con renovadas energías continuamos la ruta en ascenso hasta el collado / Puerto de Recilla (1268m) que separa las cumbres de Cervera y Recilla. En un corto desplazamiento por la estrecha senda ascendemos primero a ésta última. Peña Recilla (1376m) que no es tan espectacular como las cumbres que hemos ascendido anteriormente, pero al encontrarse sobre la ruta no podíamos perder la oportunidad de añadirla a la colección de cumbres del día. Sin embargo sí que tenemos desde ella una bonita imagen hacia Peña Palomares recientemente alcanzada.

            Regresamos al collado y a continuación es la montaña Cervera (1385m) a la que del mismo modo ascendemos sin dificultad alguna. Desde esta cumbre seguimos a continuación por la senda a la que hoy estamos abonados. En fácil recorrido por la cresta llegamos sin problemas hasta Peña Artesilla mientras observamos hacia el Norte una depresión a modo de valle colgado y cerrado, cubierto de tupida vegetación. Llegando a la Peña Artesilla (1339m) nos recibe la escultura de un montañero de hierro con toda clase de detalles. Una obra de artesanía que nos ha dejado su autor, a buen seguro también montañero, Félix Sáez de Eguilaz.

            Descendiendo de Artesilla, la senda nos conduce por un corto tramo de espesa vegetación de boj y regresa de nuevo al lomo limpio del cordal. En pocos minutos nos situamos sobre la sencilla cumbre Peña Mendegorri (también Peña Roja – 1283m). Regresamos nuevamente a la senda que faldea por el costado Norte muy cubierta por la vegetación de boj. A duras penas si podemos seguir su curso debido a la densidad y altura que oponen cierta resistencia a nuestra avance. Solo cuando retornamos a la arista el terreno es más cómodo y conseguimos alcanzar sin mayores problemas el monte Castillo Vallehermosa (1259m).

            Ya hemos posado sobre 8 cumbres de la Sierra de Cantabria y solo nos queda ascender Eskamelo para completar el recorrido entre cordales, aristas y cumbres de esta preciosa Sierra. No va a resultar ni sencillo ni cómodo llegar a esta última cota. Desde la distancia destaca la esbelta montaña rocosa que se eleva entre ambas laderas, la de orientación Sur más escarpada y la que da al Norte alberga una densa vegetación. Si para acceder a las anteriores cumbres podíamos seguir trazados de senda, en esta ocasión llegando por el Este no vemos un itinerario muy claro (la ruta normal de ascensión llega por el Oeste). Parte del recorrido lo hacemos buscando los huecos entre la roca y la vegetación hasta encaramarnos sobre la misma arista. Es bastante aérea además de estrecha y hay que prestar especial cuidado para progresar sobre ella. Ganamos metros lentamente hasta situarnos junto al buzón en forma de botella con sacacorchos que identifica esta soberbia cumbre Eskamelo (1292m).

            Contemplamos por última vez desde Eskamelo el perfil que hemos recorrido de la bonita Sierra de Cantabria así como las panorámicas sobre las extensiones de terreno llegando a distinguir incluso la ciudad de Logroño. Hacemos la bajada por la ruta normal de esta montaña a la que se puede acceder fácilmente desde el Puerto de Herrera. Un breve destrepe nos sitúa sobre la senda que seguiremos, dejando a nuestra izquierda el cresterío con la prolongación de la Sierra y cumbres de algunas otras peñas como Dehesarroque (Piedra Alta) y Peña del Cuervo, así como otros muros y agujas de roca que embellecen el entorno. Entre el bosque, la senda nos lleva primero a pasar por el Puerto de Pipaón (1099m) donde ya tomamos un amplio camino que nos conduce a la carretera del Puerto de Herrera. Unos minutos sobre ella y llegamos a donde tenemos aparcado el coche con el que desplazarnos hasta el punto de inicio de la ruta, allá por Lagrán.

Tiempo total dedicado a la ruta: 10,30’ horas.

Desnivel acumulado de subida: unos 1.430 metros

Distancia recorrida: aprox. 13,2 kms

Climatología: Día despejado y calor. Mucho calor. Afortunadamente una buena parte del recorrido transcurre a la sombra de los bosques.

                                             Plano y referencias tomados del servicio IGN.

Veamos el grupo de fotos de la ruta.

En el pueblo de Lagrán hemos tomado la pista que sigue hacia el puerto de Lagrán en la Sierra de Cantabria. Por ella hemos avanzado aproximadamente 1,5 km. Dejando el coche ya seguimos andando por el camino marcado GR-38.

El bosque principalmente de hayedo y abundante boj nos ofrece la frescura necesaria para un día caluroso como hoy.

Alcanzamos el puerto de Lagrán donde dejamos de seguir el GR que pasa a la otra parte de la Sierra hacia Laguardia. Aquí tomamos la senda señalizada que hacia la derecha se abre paso entre el espeso bosque de boj y hayedo conduciéndonos a la Cruz del Castillo.

En la foto vemos las llanuras hacia el Sur de la Sierra donde se encuentra Laguardia.

La senda sigue hacia arriba hasta alcanzar un pequeño collado que separa Larrasa de la Cruz del Castillo. En la foto, cota secundaria en el cresterío de la peña Larrasa.

Desde el collado seguimos hacia la derecha donde ya vemos la cruz que preside la montaña Cruz del Castillo.

Subimos por la empinada senda, a veces escavada en la roca, hasta la gran cruz de hierro.

Posamos en la Cruz del Castillo.

Enrike, Elías y Javier.

Hay muy buenas vistas desde esta montaña. En la foto, la continuidad de la Sierra hacia el Este donde se encuentran Peña León y San Tirso.

Descendemos al pequeño collado para tomar la senda que asciende a Larrasa.

Atrás dejamos la Cruz del Castillo.

Empinada la senda por donde subimos a Larrasa.

Una corta trepadita por el hueco que se abre entre la roca para acceder a la parte superior de la Peña Larrasa.

Lagrán, llanuras y bosques al Norte de la Sierra de Cantabria.

Mirando hacia el Oeste de la Sierra de Cantabria que seguiremos recorriendo. Peña Palomares la más inmediata.

Descendiendo de Larrasa. Vemos claramente en el centro de la imagen la Cruz del Castillo.

Siguiendo la senda para acercarnos a la Peña Palomares.

Otra toma mirando hacia atrás donde sigue apareciendo la Cruz del Castillo y la bonita cresta de rocas donde se encuentra Larrasa que hemos ascendido anteriormente.

La senda ahora nos introduce en el bosque.

Llegamos a una brecha por la que debemos pasar y descender a la vertiente Sur de la Sierra.

Elías destrepando la canal de la brecha.

Enrike por la canal sumamente inclinada.

Nuevo tramo de destrepe por la canal.

Hemos descendido por la canal unos 60 metros y la senda nos conduce a remontar la ladera de enfrente.

Desde arriba de la ladera enfocando hacia la canal que hemos destrepado.

De nuevo por la vertiente Norte en ascenso hacia Palomares.

Enrike progresando sobre la cresta hacia Palomares.

Elías asomándose a este balcón volado sobre la vertiente Sur.

Sobre la cresta hacia Palomares. Por detrás la Cruz del Castillo y Larrasa.

La cumbre rocosa de Palomares. Solo queda una corta trepadita.

Detalles en la cumbre de Palomares.

Perspectiva hacia atrás del recorrido. Peña León y San Tirso, Cruz del Castillo y Larrasa.

Testimonial en la cumbre de Palomares. Javier, Enrike y Elías.

Extensiones de bosque hacia el Norte de la Sierra de Cantabria.

La siguiente cumbre que alcanzaremos será Peña Recilla. Luego Cervera, Artesilla, Mendegorri, Vallehermosa y Eskamelo.

Mirando hacia las llanuras donde se encuentra Laguardia.

Descendemos de Palomares y la senda nos conduce por la ladera Norte.

Entre bosque de boj y hayedo.

Descendemos hasta la fuente de Laziturri. Buen lugar para detenernos a descansar un ratillo y reponer fuerzas.

Después del descanso continuamos la marcha en ascenso hacia el collado / Puerto de Recilla.

Desde el collado de Recilla ascendemos a Peña Recilla.

Desde Recilla mirando hacia atrás donde vemos Palomares y Larrasa.

Regresamos al collado de Recilla para subir la siguiente montaña: Peña Cervera.

Durante todo el recorrido se puede observar variedad de flora de montaña. Sirva una pequeña muestra.

Enrike y Elías sobre Peña Cervera.

Desde Peña Cervera acerco con el zoom Palomares, Larrasa y asomando ligeramente Cruz del Castillo.

A por la siguiente montaña: Peña Artesilla. A la derecha de nuestra marcha, hacia el Norte, se encuentra una depresión a modo de valle suspendido y cerrado, cubierto de tupida vegetación. Al fondo vemos la peña Eskamelo a la que también ascenderemos.

Valle suspendido.

Alcanzamos la peña Artesilla.

En la peña Artesilla posamos junto al hombrecillo de hierro.

Mirando hacia atrás vemos Cervera y Recilla. Tambiém Palomares y Larrasa.

Hacia adelante Mendegorri, Castillo de Vallehermosa y Eskamelo. Más al fondo la Sierra de Toloño, continuación de la Sierra de Cantabria. Por ahí se encuentra la peña San León.

Mirando hacia atrás, otro aspecto de la recién ascendida peña Artesilla.

De camino ascendemos Mendegorri.

Otra pequeña muestra de flora de la Sierra de Cantabria.

Más cerca de la bonita montaña Eskamelo.

Aspecto de Mendegorri desde abajo.

Siguiendo hacia Eskamelo, la vegetación de boj cubre el sendero.

Todavía podemos sumar esta otra cota: Castillo de Vallehermosa.

Mirando hacia atrás desde Castillo de Vallehermosa. A la derecha del valle colgado: Mendegorri, Peña Artesilla y el conjunto Palomares – Larrasa.

La abrupta peña Eskamelo. Nos costará llegar hasta arriba abriéndonos paso entre la vegetación y seguir por la estrecha arista. Ruta entretenida y divertida.

El avance por la estrecha arista con precaución.

En la cumbre de Eskamelo con la curiosa identificación fijada fijada sobre la roca.

Elías, Enrike y Javier.

Última mirada hacia atrás de la Sierra de Cantabria. Muy bonita, de verdad.

Con las 9 cotas sobre su largo recorrido ya podemos darnos por bien servidos.

Nos vamos para abajo siguiendo la senda de ascensión normal a Eskamelo que ahí se queda.

Seguimos hacia el Puerto de Herrera siendo un itinerario menos abrupto que por donde hemos subido, pero también entretenido.

Aunque también la vegetación es muy cerrada.

Junto a las paredes rocosas de la Sierra.

Llegamos a la carretera del puerto de Herrera y andamos por ella un corto tramo hasta donde tenemos el coche.