sábado, 29 de octubre de 2011

ARP. Etapa 39. Cortalets – Moli de la Paleta (Amélie).

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08 de Agosto 2.007                                                 (ir a etapa siguiente…)
Cortalets – Moli de la Paleta (Amélie).

Plano del IGN francés.



No ha estado nada mal el descanso sobre litera y además con colchoneta en este refugio no guardado del CAF de Cortalets. Cuando anocheció el cielo se había quedado despejado y se nos subió la moral al suponer que ya había pasado el mal tiempo de cara a la siguiente etapa. Yo aún mantenía la idea de intentar la ascensión al pic du Canigou. “Si las condiciones meteorológicas nos lo permiten… podríamos realizar la ascensión desde aquí yendo muy ligeros de peso y en no mucho tiempo estaríamos de nuevo de regreso en el refugio para recoger el resto de nuestro equipo y continuar la ruta”. Es lo que yo pienso y se lo propondría a Carlos. Pero a eso de las 5hs de la mañana ya se escuchaba cómo la lluvia golpeaba sobre la tejabana del refugio. Me temo que mi ilusión y mis planes se van al traste. A las 6hs ya estamos levantándonos. Se mantienen las nieblas, también la llovizna y el mal tiempo. Así que ya no hay que darle más vueltas teniendo que descartar definitivamente el intento de ascensión a esta montaña. La pareja de los montañeros veteranos franceses han sido más madrugadores y han salido del refugio bastante temprano. Nosotros ya estamos preparados también para salir a las 8hs. Llueve en estos momentos y a veces con intensidad. Así que abandonamos el refugio de Cortalets (2.150mts) con el equipo de protección de lluvia. Al mismo tiempo que nosotros también están saliendo las dos parejas de Irún que conocimos hace dos días antes de llegar a Mariailles y que también están haciendo la ARP. Han pasado la noche en el refugio guardado y volvemos a coincidir después de no habernos visto el día anterior. La etapa de hoy se presta a que la hagamos acompañados pese a la diferencia de mochilas que llevamos unos y otros. Yo intentaré quedar bien y no descolgarme del grupo. Además me siento totalmente recuperado después de las molestias que me condicionaron hace unos días. Según los planos y referencias, la etapa de hoy se presenta muy larga en desplazamiento y con un desnivel en descenso de unos 2.200 metros. En cuanto a subida no parece vayamos a tener gran cosa. Veremos qué tal se nos da el día. Tomamos la buena senda del GR10 que sigue circunvalando lo que nos queda de la montaña del Canigou. Los chubascos son a veces de intensidad y alternan con momentos en que cede algo la lluvia. Tampoco hoy vamos a poder disfrutar de paisaje. Pasamos por el Ras del Prat Cabréra (1.739mts) y tras cruzar el valle de Lentilla la senda en suave descenso nos lleva hasta la cabaña de l’Estanyol (1.479mts) donde paramos para un breve descanso y recuperar energías. Enseguida estamos de nuevo en marcha. Suponemos que aunque la niebla y nubosidad nos impidan verlo, el entorno debe de ser bonito e interesante. Hay mucha vegetación, bosque y humedad. Pero tal como está el ambiente no hay motivación ni para sacar fotos. Hemos de conformarnos con seguir el trazado de la buena senda aguantando la lluvia. Ascendemos al col de la Cirère (1.731mts) y muy próximo tenemos el entorno de las minas de Batère (1.522mts). A partir de aquí ya cambian las condiciones meteorológicas de una manera radical. Las nieblas se quedan por fin atrás manteniéndose la nubosidad  en el macizo de Canigou.  Parece que afortunadamente ya no tendremos que soportar más lluvias. Hay varias pistas entre la masa forestal y antiguas bocas de mina fuera de servicio. En el col de la Descarga (1.393mts) abandonamos el GR10 que sigue por el Tour du Vallespi hacia Arles-sur-Tech. El itinerario que nosotros tomamos nos lleva a pasar junto a las ruinas de la torre de Batère, antigua construcción de vigilancia medieval sobre el Puig de l’Estelle (1.429mts), Seguimos en descenso hacia el collado de Formentera (1.133mts) por terrenos menos emocionantes. Nos desplazamos siguiendo una pista que atraviesa la gran masa boscosa dando rodeos con numerosas curvas para ir salvando el desnivel. El recorrido se nos está haciendo un tanto pesado alargándose más de lo que nos habíamos imaginado. En descenso llegamos al collado de la Reducta (889mts) desde donde ya podemos ver el valle del Tech en el que se encuentran las poblaciones de Arles-sur-Tech y de Amélie-les-Bains. Finalmente una senda que pierde desnivel muy rápido nos baja hasta ésta última población (220mts).

La ruta de hoy ha resultado bastante dura y pesada sobre todo para quienes vamos más cargados. Ha sido de mucho desplazamiento. Yo particularmente me encuentro muy cansado. Los jóvenes de Irún tienen reserva de alojamiento en la gite d’étape de Amélie. Pero no saben dónde se encuentra ésta. Amélie es una población bastante extendida a orillas del rio Tech. Preguntan y la gente no les dan razón de dónde pueda estar la dichosa gite d’étape. Terminan por aclarárselo en el puesto de Información confirmándoles que este lugar está alejado de la población remontando el valle de Montdony. Tras comunicar por teléfono, el dueño de la gite vendrá a buscarlos con su coche. Mientras tanto, Carlos y yo nos mantenemos espectantes a ver cómo se desarrolla el traslado. Todo esto nos pilla un poco de sorpresa y  nos encontramos indecisos. Nos sentimos bastante cansados y también la tarde ya está un poco avanzada. Barajamos la posibilidad de acomodarnos también en la gite d’étape. Cuando llega el dueño de la gite con su vehículo para recoger a los muchachos, le planteamos si puede volver luego a recogernos también a nosotros. El señor se lo piensa. Nos mira, observa las abultadas mochilas, mira a su vehículo… “Ala!. Subid todos al coche y vamos para mi casa!”. Nos colocamos dentro del coche los seis montañeros más el conductor y todas las mochilas. Qué barbaridad!. Dudo que pueda con todo. Por delante una carretera muy estrecha que durante 10 kilómetros remonta el valle de Montdony hasta su casa, la “gite d’étape” de Moli de la Paleta (661mts). Sería problemático si a tal tiempo bajase otro coche pues no hay espacio para cruzarse. Al borde de la carretera descuelgan los precipicios del barranco. Qué alivio cuando llegamos a la residencia sanos y salvos. Ha sido una experiencia muy agobiante. Es la hora de cenar y no tienen prevista comida para dos extras que somos nosotros. No parece decente que insistamos y tengan que reducir las raciones de los numerosos residentes actualmente alojados. Así que no nos importa prepararnos la cena con nuestras provisiones. Eso sí. A la mañana siguiente desayunaremos sin problemas como los demás. Bueno. Por fin ya estamos descansando de la agotadora jornada que nos ha castigado físicamente mucho más de lo que podríamos pensar con el añadido de las incertidumbres  de última hora. A la ruta de hoy le hemos dedicado poco más de 10 horas hasta la llegada a Amélie-les-Bains. No contamos el largo tiempo de espera en el pueblo hasta que solucionamos el tema del alojamiento. En cuanto al desnivel acumulado de subida, este ha sido de unos 250 metros y el de bajada de unos 2.190 metros.





Sigue una pequeña muestra de fotos de la ruta…



Hemos descansado bien en el refugio libre del CAF de Cortalets. Pero la mañana se presenta nubosa y con precipitaciones. Mala perspectiva para la etapa que nos espera hoy. Salimos del refugio con el equipo de protección de lluvia.  




Justo al lado de donde hemos pasado la noche está el edificio del refugio guardado también del CAF.




Salimos al mismo tiempo que las dos parejas de montañeros de Irún que conocimos hace dos días antes de llegar a Mariailles. También están haciendo la ARP aunque con diferente filosofía a la nuestra. El hospedaje lo hacen en refugios guardados, con lo que sus mochilas van muy ligeras de peso… Muy sueltos para hacer la ruta. Véase en la foto cuatro personas con lijeras mochilas y el quinto, que es Carlos, con ese abultado mochilón cubierto con su cubre-mochilas, que ni se sabe lo que pueda llevar ahí a sus espaldas.




Aunque en algunos momentos la lluvia da treguas lo normal es que persista durante buena parte de la mañana.




Estamos en el col de Cirère. Nos fijamos en la curiosa reseña del cartel de abajo.






Por aquí nos encontramos en el entorno de las minas de Batère.





Luego pasamos junto a las ruinas de la torre de Batère, antigua construcción de vigilancia medieval.




Bueno. El tiempo ha cambiado radical. Las nubes de lluvia se han quedado en la zona de Canigou y por aquí ya vemos el horizonte muy despejado. Guardamos los paraguas y las capas de lluvia.





Hasta sale el sol cuando pasamos por el bosque de la Fajosa.




Las masas boscosas son enormes. Estos son los bosques de Vallespir.




La ruta nos hace coincidir con tramos de pistas forestales que salvan el desnivel de la montaña con curvas que alargan considerablemente el desplazamiento.




Preferimos los tramos de senda mejor que las pistas.




En la foto vemos la localidad de Montbolo pero que no necesitamos pasar por ahí.




Hemos seguido descendiendo hasta el valle del Tech yendo a parar a la población de Amélie-les-Bains. La jornada de hoy ha sido larga y agotadora. Nos encontramos bastante cansados y pensamos en la posibilidad de alojarnos en la “gite d’étape” donde tienen hecha la reserva los de Irún. Como queda explicado más arriba, después de salvar algunos inconvenientes llegamos todos a Moli de la Paleta donde se halla situada la dichosa “gite d’étape”. Esta se encuentra en medio del monte en un lugar encantador. En la esquina de abajo de la foto se ve el morro de la pequeña furgoneta citroen en la que el dueño de la hospedería nos acercó en un solo viaje a los seis montañeros con nuestras mochilas. De alucine!.




Nos acomodamos en algo parecido a una habitación y como no somos muy exigentes asumimos que es ahí donde pasaremos esta noche. Los camastros tienen edredones y sábanas pero dormiremos sobre el colchón dentro de nuestros sacos. Y como sigamos así, subastamos la tienda de campaña…





No nos gusta mucho esto de acabar las jornadas en “gite d’étape”. Añoramos los vivacs en la soledad de la montaña, pero a veces las circunstancias nos hacen ser flexibles. Sobre todo han sido las lluvias las que más nos han condicionado estas últimas etapas. A ver si en los próximos días se nos mantiene ya el buen tiempo y podemos disfrutar de nuestra marcha.

miércoles, 26 de octubre de 2011

106 – Peña Corva (Sierra de la Tesla)

Actividad realizada en fecha 23 Octubre de 2.011

Sierra de la Tesla (Burgos). Para llegar al punto de partida de la ruta completamos el siguiente itinerario: Burgos-Briviesca-Oña-Trespaderne-Quintanalacuesta. Es en esta última localidad (700mts) de Merindad de Cuesta Urría, en la que se inicia la ruta para ascender a la Peña Corva. Se toma el camino que en dirección Sur se aproxima a las laderas de la montaña para luego ya por senda alcanzar el portillo de Medina (1.232mts) en el cordal de la Sierra de la Tesla. Se sigue por este cordal primero en dirección Noroeste y después totalmente Oeste pasando primeramente por el inmediato pico San Mamés (1.264mts). A continuación una cómoda senda sigue por todo el cordal hasta llegar al punto culminante de la Sierra que es Peña Corva (1.333mts). Para el descenso  y con la intención de un recorrido alternativo al de subida, se desciende en dirección Oeste hasta un collado (1.207mts) desde donde se cambia a dirección Este bajando por una vaguada y continuando por el barranco hasta el paso estrecho en donde confluyen las paredes rocosas de una y otra parte. Sobrepasado el barranco, siguiendo dirección Este por la base de la ladera Norte de la Sierra de la Tesla se asciende un cercano collado (856mts), luego en la misma dirección otro nuevo collado (874mts) para a continuación descender por la cuenca del arroyo de Rebollo hasta alcanzar un camino que une las localidades de Baillo y Quintanalacuesta donde finaliza la ruta.


Elías y Javier.

Llegando al pequeño pueblo Quintanalacuesta (700mts) en la Merindad de Cuesta Urría, comenzamos la ruta siguiendo un camino que busca las laderas de la Sierra de la Tesla. En el itinerario correcto hay que ir descartando algunos otros caminos menos evidentes que encontramos al paso. Como detalle del adecuado, a los pocos minutos de iniciada la ruta hay que cruzar una portilla para la que se han aprovechado algunos restos de un apero de campo. Seguimos por el camino que atraviesa un bosque de pinos y sobrepasado éste se despeja el terreno para seguir ya por senda que va ascendiendo la ladera sobre una pendiente de bastante inclinación. Vamos ganando altura y por consiguiente con el terreno ya despejado de vegetación podemos contemplar las extensiones de llanura alcanzando a identificar entre otras las localidades de Medina de Pomar y Villarcayo. Hacia arriba vemos muy clara la parte elevada de la Sierra a la que nos vamos aproximando, con el portillo de Medina como referencia al que tenemos que llegar. Sobre la marcha nos llama la atención y nos atrae la curiosidad del castillo de Montealegre que vemos desviado de la ruta. Se encuentra en la cúspide de un promontorio aislado y rodeado de vegetación muy tupida. No podemos resistirnos y decidimos intentar llegar hasta él abandonando momentáneamente la ruta del portillo de Medina antes mencionado. Seguimos una somera traza de senda por la misma ladera pero con mucho cuidado de no resbalar al pisar sobre la gravilla en la fuerte pendiente. Nos vamos aproximando y descendemos por una corta pedrera para a continuación abrirnos paso entre la vegetación salvaje llegando al emplazamiento de las ruinas de la fortaleza (998mts). Bordear el castillo para llegar a la puerta en su pared Norte nos parece tarea complicada. Nos introducimos en su interior por un pequeño boquete abierto en la pared Sur. Ya en el interior no vemos más que las ruinas de las cuatro paredes que aún se mantienen en pié y una gran abertura donde claramente estaría la puerta de acceso. Por lo que he llegado a saber, el castillo fue mandado construir a finales del siglo XIV por Pedro Fernández de Velasco para controlar el paso de la antigua vía medieval que servía para llevar a Burgos y al resto de Castilla los productos del Cantábrico. Este mismo camino permitía transportar la lana merina castellana hacia el Norte. Satisfecha nuestra curiosidad volvemos sobre nuestros pasos hacia la ladera de la Sierra y llegar al portillo de Medina (1.232mts) para continuar la ruta prevista. No es nada complicado recorrer la parte superior de la Sierra de la Tesla hasta alcanzar el punto más elevado de la misma que es la Peña Corva en su extremo Occidental. Una cómoda senda la recorre en toda su extensión mientras podemos ir contemplando las extensas panorámicas hacia el Norte con las llanuras que se extienden hacia Medina de Pomar y Villarcayo alcanzando también a ver incluso los montes de Valnera. Y hacia el Sur es la Merindad de Valdivielso con los bonitos valles y barrancos que confluyen en la cuenca del Ebro. Siguiendo la ruta, primeramente alcanzamos la cota del pico San Mamés (1.264mts) que se encuentra al paso. Luego ya continuamos por el largo recorrido de unos cuatro kilómetros hasta la Peña Corva (1.333mts). El fuerte viento a veces con ráfagas de mucha intensidad nos ha acompañado en todo este recorrido de la parte superior de la Sierra. Desde la Peña Corva no vamos a regresar por el mismo itinerario de subida. Continuamos hacia el Oeste descendiendo hasta un collado (1.207mts) bajo un morro rocoso. Desde ahí cambiamos la orientación para continuar descendiendo hacia el Este por un valle al principio amplio y que va estrechándose hasta llegar a un paso de embudo (800mts) entre las paredes escarpadas que confluyen de una y otra parte. Hay dos opciones para descender el barranco. Una senda va por el fondo del mismo y otra, la que nosotros hemos decidido, nos lleva por la parte algo más elevada hasta confluir abajo en el paso obligado mencionado anteriormente. El valle natural sigue hacia el Norte hasta las inmediaciones del pueblecito de Barruelo. Nosotros no queremos todavía separarnos de las faldas de la montaña y continuamos hacia el Este alcanzando un collado (856mts) que da al valle por el que se puede descender al pueblo de Baíllo pasando junto a la ermita de la Virgen de la Hoz. Sin embargo todavía seguimos sin descender y continuamos aún más hacia el Este pasando por un nuevo collado (874mts) que se encuentra a la derecha de la elevación de Coto Negro. Desde aquí ya sí. Llegando al valle del arroyo de Rebollo bajamos por él entre bosque mezclado de boj, roble y encina hasta un camino que une las localidades de Baíllo y Quintanalacuesta y por el que seguimos hasta finalizar la bonita ruta en el punto de partida. Le hemos dedicado un total de casi 8 horas incluidas las paradas y extensiones que se separaban de la ruta principal. En cuanto a desnivel acumulado de subida ha sido de unos 1.000 metros aproximadamente.


Plano con el recorrido.
Cartografía y referencias tomados del servicio IGN.



Ahora pasamos a ver la secuencia gráfica de la ruta…

Hemos salido de la población de Quintanalacuesta siguiendo un camino que busca las laderas de la Sierra de la Tesla. Tenemos que descartar algunos otros que por intuición nos parecen menos evidentes.


Como referencia, y para confirmar que vamos por el adecuado, a los pocos minutos de iniciada la marcha pasamos por esta portilla hecha con aperos de labranza.


Vamos bien, y abriéndose un poco la vegetación vemos que el camino nos lleva efectivamente hacia las laderas de la Sierra.


Nos metemos brevemente bajo un corto bosque de pinos.


Superado ya el bosque seguimos por una clara senda que va ganando altura sobre la ladera. Vemos las llanuras de Merindad de Cuesta Urría identificando al mismo tiempo las poblaciones de Medina de Pomar y Villarcayo.


Dándole zoom a la cámara, este es el pueblecito de Quintanalacuesta desde donde hemos iniciado la ruta.


Al fondo la silueta de los montes de Valnera.


Desde la senda de subida alcanzamos a ver no demasiado distante los restos del castillo de Montealegre que destacan sobre la cúspide de un agreste promontorio. No podemos resistirnos y nos proponemos intentar acercarnos abandonando momentáneamente la ruta que nos llevaba hacia el portillo de Medina.




El acceso no es nada cómodo ni sencillo pues no hay senda frecuentada por donde nosotros vamos. Descendemos un poco por terreno en el que hay que tener cuidado de que no se nos vayan los pies pisando la gravilla suelta. Luego nos abrimos paso entre la vegetación salvaje que como vemos invade el entorno del promontorio.


Y conseguimos llegar hasta las ruinas de la fortaleza.


Bordear el contorno exterior para llegar al acceso en su pared Norte nos parece tarea complicada. Así que para el "asalto" al castillo nos servimos de este boquete abierto en la pared Sur e introducirnos de esa forma en su interior.


Lo que vemos en el interior son las cuatro paredes que aún se mantienen en pié y la gran abertura donde estaría la puerta de acceso.



Satisfecha nuestra curiosidad volvemos a la ruta original para llegar al portillo de Medina en el cordal de la Sierra de la Tesla. Ahí dejamos el castillo de Montealegre y su agreste entorno.


Aquí estamos ya en el portillo de Medina para continuar seguidamente por todo el cordal de la Sierra. Accedemos a esa primera elevación que encontramos al paso que es el pico San Mamés.



En esta foto vemos la longitud del cordal hasta el extremo occidental del mismo con el punto más elevado de la Sierra que es Peña Corva a donde nos dirigimos.


La senda que seguimos por todo el cordal es cómoda y por lo que apreciamos sobradamente frecuentada.



Una mirada hacia el Sur con los valles y barrancos que confluyen en la cuenca del Ebro, Merindad de Valdivielso.


Nos sorprende por el camino un grupo con motos todo-terreno.


Ya estamos más cercanos a Peña Corva que se encuentra después de pasar este primer morro rocoso. A la derecha del mismo vemos esa otra punta rocosa que en su izquierda tiene un collado. Por ahí pasaremos  para descender por el barranco que también se intuye en la foto.


En medio de la roca se abre una brecha para alcanzar la parte elevada.


Superado el anterior paso de roca ya estamos en la parte final de la subida a la Peña Corva.


Hace un fortísimo viento que no permite colocar la cámara para una foto con disparador automático. Así que “yo te saco la foto y tú me sacas a mí”. Y aquí está la testimonial de la cumbre Peña Corva que también es vértice geodésico. Elías por un lado y Javier por el otro. La perra "Chus" también merece una mención. Qué feliz se encuentra cuando nos acompaña en nuestros paseos por la montaña.


Capto el simbolillo con la placa de la cumbre. Peña Corva, con “v”, con “b”... ¡Qué más da!.


Tras una leve pausa en la cumbre nos movemos hacia abajo. No resulta muy agradable estar mucho tiempo soportando el fuerte viento.


En el collado bajo el morro rocoso. Ahora giramos hacia la derecha para descender por el barranco como indicaba en una foto anterior.




Mirando hacia arriba del barranco que estamos descendiendo.


El barranco se estrecha entre las paredes de la izquierda y de la derecha.


Aquí estamos con la puerta abierta del paso obligado del barranco.


El barranco continúa su descenso dirección Norte hacia el entorno de la localidad de Barruelo. Nosotros no queremos todavía separarnos de las faldas de la montaña y continuamos hacia el Este. Alcanzamos un primer collado.


Después vamos a pasar por ese otro collado a la derecha de la montañita “Coto Negro”. Sin perder altura atravesamos por la masa boscosa de boj previa al collado.


En la travesía entre collados vemos a cierta distancia la ermita de la Virgen de la Hoz próxima a la localidad de Baíllo.



Después del anterior collado descendemos por el valle del arroyo de Rebollo entre bosque de boj, robles y encinas.


En un par de ocasiones nos vemos obligados a agacharnos y con cuidado de no engancharnos en el alambre de espino de algunos cercados.


Y ya llegamos al camino que une las localidades de Baíllo y Quintanalacuesta por el que seguimos para llegar al punto donde habíamos iniciado la ruta.


Y por aquí entramos en Quintanalacuesta donde finalizamos esta entretenida y amena ruta.