miércoles, 6 de noviembre de 2013

193 – Peña Maciédome.



Ruta realizada en fecha 03 de Noviembre de 2.013

Itinerario:
Pendones – La Llongar – La Llana Fresnu – Collado de Llagu – Peña Maciédome – Collado de Llagu – Recuenco – Foz de Congostín – Arroyo de Pendones – Pendones.

                                         Peña Maciédome, objetivo de esta jornada otoñal.


                                                                                      Ubicación de la ruta.


Kike, Noelia, Sergio y Javier.

         

            La ruta circular que elegimos en esta jornada otoñal lleva incluida la ascensión a la Peña Maciédome partiendo de la localidad de Pendones en el Parque Natural de Redes (Asturias). Aquí nos hemos dado cita Kike, Noelia, Sergio y servidor tras haber descendido el puerto de Tarna cuya carretera baja el valle que forma el incipiente río Nalón.
            Dejando el coche en un amplio aparcamiento situado en la parte baja del pueblo (750mts), cruzamos el arroyo de Pendones para seguir dirección Sur por el camino cementado que se abre paso entre fincas protegidas con sus respectivos cercados. Este camino lleva hasta Vega Riba y Vega Baxio remontando el valle que forma el arroyo de Corralín. Pero debemos abandonarle cuando llevamos andados unos 30’ de marcha teniendo que tomar el desvío cuyo trazado asciende con numerosos giros por el atractivo hayedo.
            Pasamos junto a la cabaña La Llongar (1.060mts) y luego enseguida la senda sale ya del bosque para continuar por terreno despejado de arbolado pudiendo así observar la agreste y salvaje orografía montañosa de la cuenca del Nalón. El itinerario bordea la ladera Sur del Pico Las Coronas (1.509mts) haciéndonos pasar por la colladina de la Llana Fresnu (1.359mts) con una pequeña pradera y cabaña incluida. El camino continúa para alcanzar poco más adelante el collado de Llagu (1.533mts) que separa el Pico el Cascayu (1.602mts) de la Peña el Quemao (1.658mts), ésta en el cordal de Maciédome. El enclave del collado nos parece fascinante. Sobre la amplia pradera permanecen las ruinas de un grupo de cabañas pastoriles. Pero lo que nos llama poderosamente la atención es la atractiva imagen que desde aquí observamos hacia el pico Tiatordos cuyo macizo rocoso sobresale aislado por encima de una extensa masa boscosa.
            Después de haber disfrutado unos minutos de este soberbio balcón, tomamos la bien marcada senda que hacia el Sur del collado nos aproxima a la vertical Suroeste de la montaña que hoy pretendemos ascender, la Peña Maciédome (también Alto de Ponga). Tan entusiasmados nos encontramos caminando entre el bosque de hayedo que nos descuidamos pasando de largo el lugar en el que se desvía el itinerario de la ascensión a la Peña señalizado con jitos. Hemos continuado por la senda más marcada alejándonos de la desviación. Pero no importa si todavía rectificamos a tiempo. Sin regresar al punto anterior, emprendemos la subida por las exigentes pendientes de la ladera siendo ya bastante arriba cuando logramos coincidir con el itinerario marcado con jitos por el que ya seguimos hasta la misma cima de Peña Maciédome (1.903mts).
            Esta cumbre es soberbia. Aquí sí que nos quedamos pasmados con las espectaculares panorámicas de valles y montañas miremos hacia donde miremos. Muchas de las cumbres que alcanzamos a ver las tenemos visitadas en otras tantas ocasiones. Así, hacia el Norte destaca Tiatordos y un poco más alejado en esa misma dirección también nos parece identificar el PicoCampigüeños. Hacia el Este destacan entre algo de nube los Picos de Europa con las reseñables cumbres de Peña Santa, Torre Bermeja así como Torre de Friero. Mirando hacia el Sur, muy próximas se encuentran Pileñes y Peña Ten. En esa misma dirección también vemos los Picos de Mampodre, Pico Yordas… En fin.  Es muy grande la satisfacción que sentimos sobre este singular balcón contemplando e identificando montañas de todo el entorno. Buscamos un poco de protección del viento fresco que sopla sobre la cumbre para tomar el bocadillo, aunque prestamos más atención a las vistas que tenemos en dirección a Picos de Europa y Tiatordos que a la propia ingesta de alimento.
            Emprendemos el descenso de nuevo al collado de Llagu (1.533mts) desde donde en lugar de volver por el itinerario de subida, bajamos hacia el Norte pasando por la cabaña Recuenco (1.330mts). Luego a continuación la ruta nos lleva a pasar por la Foz del Congostín modelada por el arroyo la Requiebra que en su curso aguas abajo se junta a los arroyos de Montefó, de Palombar, de Llábana y de Rinavea y entre todos los aportes terminan por formar el arroyo de Pendones para verter su caudal en el Nalón. Esta última parte del recorrido por los hayedos resulta sumamente agradable y entretenida, completando finalmente una jornada muy satisfactoria por atractivos parajes del Parque Natural de Redes.

Tiempo total que hemos dedicado a la ruta: 8 horas (ritmo suave).
Desnivel acumulado de ascenso, unos  1.153 metros.
Kilómetros recorridos: unos 11,6 kms.
Climatología: Cielo prácticamente despejado con aparición de alguna nube. Temperatura propia de otoño y solo en la cumbre viento fresco que obligaba abrigarse.

(Podemos también ver la interesante versión de Kike publicada en su blog; "el blog de naturkike" ).          


                                                               Plano y referencias tomados del servicio IGN.


Ahora veamos la muestra gráfica de esta ruta,


Bajando el puerto de Tarna en la vertiente Asturiana me detengo a fotografiar estos contrastes de colores.

El pueblo de Tarna en el valle del Nalón.

Sergio y Noelia en el pueblo de Pendones donde comenzamos la ruta.

Pueblo de Pendones a los pies de Peña La Quemada.

Momentáneamente seguimos por el camino que va hacia Vega Riba y Vega Baxio.

Unos 30’ después de haber comenzado la ruta dejamos el camino principal para tomar el desvío que ya inician Kike y Sergio hacia La Llongar y collado de Llagu.

Bonita senda entre el hayedo.


Kike y Sergio observando la cabaña de La Llongar.

La senda sale del hayedo y continúa por terreno despejado de arbolado.

Valle del Nalón bajo la Sierra Fuentes.

Noelia sobre la cómoda senda que bordea la ladera Sur del Pico Las Coronas.


Alcanzamos la Llana Fresnu bajo el Pico Las Coronas.

Mirando hacia atrás donde queda la Llana Fresnu con la pequeña pradera y cabaña.



Antes de llegar al collado de Llagu ya tenemos esta bonita imagen de la Peña Maciédome.

De nuevo mirando hacia atrás donde seguimos viendo la Llana Fresnu.

Complicada pero muy bella orografía del Parque Natural de Redes.

De nuevo la Peña Maciédome mientras Kike contempla el bonito paisaje.

En el centro de la imagen vemos la praderita Bustantigo bajo el Cerro la Roza.

Avanzando por la senda hacia el collado de Llagu con más imágenes de la Peña Maciédome.


Alcanzando el collado de Llagu.

Qué es lo que observan tan entusiasmados Kike y Noelia desde el collado ¿...?

... Pues nada menos que esta espectacular aparición de Tiatordos.


Sobre las praderas del collado de Llagu quedan ruinas de cabañas pastoriles.

Dejamos el collado atrás y seguimos la senda que nos acerca a la ladera Suroeste de la Peña Maciédome.



“Atacamos” la ladera por la que finalmente ascendemos a la Peña.

Mirando hacia el collado de Llagu. También vemos en la foto la Llana Fresnu bajo el Pico Las Coronas.

Un poco más y ya casi estamos sobre la Peña.

Kike y Sergio ya pisan cumbre.

El grupo completo en la Peña Maciédome: Noelia, Kike, Javier y Sergio.

Muchas de las montañas que vemos desde la Peña Maciédome nos traen muy agradables recuerdos. Hacia el Norte vemos Tiatordos y más alejado a su izquierda pensamos que es Campigüeños.


Hacia el Este, en primer plano montañas del Parque Natural de Ponga. A la izquierda de la foto asoma El Recuencu y a la derecha Picu Zorru separadas ambas por el valle que forma el río Vallizón.
Al fondo, más alejados tenemos Picos de Europa donde destaca Peña Santa. También a la derecha se encuentra Torre Bermeja entre la nube.


Mirando hacia el Sur también las interesantes Peña Ten y Pileñes.

Un poco más alejados los Picos de Mampodre.

Abandonamos la cumbre y nos vamos hacia abajo.

Hacia el collado de Llagu.





Otra imagen más hacia Tiatordos con los bosques de su ladera Sur.


Después de pasar nuevamente por el collado de Llagu seguimos descendiendo ahora hacia las praderas y cabaña Recuenco.

Cabaña de Recuenco.

Continuamos descendiendo hacia la Foz del Congostín.


Numerosas veces las hayas muestran formaciones caprichosas como la de la imagen. Este ejemplar a lo largo de los años  ha ido adaptando la base de su tronco sobre el perfil superior de la roca.

Colores de otoño.

También época de hongos.

Imágenes de la Foz del Congostín.



Por el camino de regreso a Pendones.

Cerca de Pendones no podemos evitar volver la mirada hacia Tiatordos.

Por las calles de Pendones.


Y para terminar, Pendones y su montaña: Tiatordos.

jueves, 31 de octubre de 2013

192 – Torocuervo desde Eterna.



Ruta realizada en fecha 27 de Octubre de 2.013

Itinerario:
Eterna (pueblo) – Pradilla (Alto de Pradilla) – Collado de Iguareña – Torocuervo – Collado de Iguareña – Alto de Corcusa – Pradilla (Alto de Pradilla) – Eterna.


                        Los protagonistas de la ruta en la cumbre de Torocuervo (1.933mts).


                                      Ubicación de la ruta.


Elías y Javier.

            La ruta de hoy va a ser una improvisación después de acercarnos al pueblo de Eterna, a donde accedemos una vez pasado Belorado en la N-120 y tomar el desvío que hacia el Sur pasa por las localidades de Fresneña y San Cristóbal del Monte para terminar en el mencionado Eterna (1.110mts) donde finaliza el asfalto.
            Sobre la marcha iremos decidiendo recorrido y objetivo después de haber comenzado a caminar pasadas las 10 de la mañana (teniendo en cuenta el cambio de horario de final de Octubre). En clara dirección Sur seguimos por un camino en principio ancho que a los pocos minutos se convierte en estrecha senda. Entre la vegetación existente podemos contemplar ejemplares de enebro y numerosos acebos destacando la vistosidad de éstos últimos especialmente cuando alcanzamos el Portillo de Larrea (1.240mts) y los más despejados campos de la Dehesa. Es desde esta posición cuando se nos abre un amplio horizonte teniendo bien a la vista el cordal de la Sierra de la Demanda. Fijamos nuestra mirada especialmente en la montaña Torocuervo que bien podría ser un interesante objetivo. Se encuentra bastante lejos pero pensamos que sería asequible. Nos moveremos en esa dirección.
            En las dehesas antes de llegar al Alto de Pradilla divisamos un numeroso rebaño de ovejas que se encuentran apaciblemente pastando. El mastín que las protege se aproxima hacia nosotros obligándonos a modificar nuestra trayectoria. Para evitar el encuentro con el fiero guardián que sigue acosándonos a cierta distancia, realizamos algunos rodeos salvando suaves vaguadas hasta llegar a Pradilla (1.188mts) en cuyo entorno contemplamos la ermita de San Esteban.
            Tras cruzar y dejando a nuestra espalda la carretera BU-811 (Pradoluengo – Ezcaray) continuamos dirección Sur por el camino que recorre la ladera Oeste del cordal que desciende del Torocuervo hasta Pradilla. Con vistas al valle del río Tirón y el pueblo de Fresneda de la Sierra Tirón que quedan a la derecha de nuestra marcha vamos librando las cabeceras de los barrancos del Agua Sal, de Gutia y posteriormente de Montelacelda  De esta manera en suave pero largo desplazamiento alcanzamos el collado de Iguareña (1.398mts) donde se encuentra un refugio de cazadores.
            Estando sobre el collado ya no tenemos escusa para animarnos a continuar la ascensión a Torocuervo. Bien es cierto que la subida de los 535 mts de desnivel desde el collado, además de exigente no va a resultar muy amena pues el itinerario no es otro que un monótono cortafuegos que se abre paso por el lomo, separando y dejando a uno y otro lado las masas boscosas de pino hasta prácticamente la cima de Torocuervo. Se suceden tramos de acentuada pendiente y breves trechos de menor inclinación. Pero nos saldremos con la nuestra a base de esfuerzo y voluntad. Poco a poco vamos ganando metros a la pendiente tomando de vez en cuando cortos respiros de recuperación sin llegar a perder de vista en todo momento el collado y refugio por el que hemos pasado momentos antes. También nos fijamos en los valles contiguos, teniendo a la derecha de nuestra marcha los de Montelacelda y Montelaszarras que confluyen en el principal del río Tirón, mientras que a la izquierda es el del río Ciloria que desciende hacia los pueblos Valgañón y Ezcaray.
            Desaparece la vegetación, los pinos quedan atrás y finalmente pisamos la cumbre de Torocuervo (1.933mts) que se halla sobre una aglomeración de pedregal. Situados junto al buzón y placa de cumbre se nos ofrecen amplias panorámicas identificando buena parte de montañas de la Sierra de la Demanda, entre las que destacan las cumbres de San Lorenzo, Campos Blancos, Otero, Cabeza Aguilez, San Millán, Trigaza… Bien, bien. El cielo está algo brumoso y no se definen muy claramente las panorámicas hacia el horizonte. No obstante sí que logramos identificar en la lejanía las siluetas del monte Gorbea y del Anboto así como de la Sierra de Aizkorri por donde nos movíamos 7 días antes.
            Agotado el tiempo del merecido y necesario descanso, emprendemos la bajada hacia el collado de Iguareña por el mismo cortafuegos de subida. Luego queremos variar un poco el itinerario conocido y nos armamos de valor para ascender algo más de 100 mts extra siguiendo la línea del mismo cortafuegos que nos sitúa en el Alto de Corcusa (1.514 mts). Con esto ya descendemos hacia Pradilla previo paso por el collado de los Cargadores (1.317mts).
            Tomamos el camino hacia Eterna y de nuevo nos topamos con los guardianes de los rebaños. Ahora son 4 los mastines que vienen a nuestro encuentro, algunos de ellos cachorros aprendiendo de sus progenitores las eficaces maneras de atemorizar a los intrusos sin amilanarse ante nuestras amenazas ni lanzamiento de alguna que otra piedra. Solo cesan su acoso después de poner tierra por medio estando ya un tanto alejados de los rebaños que protegen. Todavía pasamos junto a otro de los guardianes, agazapado en este caso entre el matorral. Nos quedamos sorprendidos de que ahora el animal ni se inmuta ante nuestra cercana presencia.
            El camino por el que vamos de regreso, ya casi a las puertas de Eterna nos lleva a pasar por un atractivo hayedo cuya travesía resulta amena. Una bonita manera de finalizar la ruta de hoy de la que quedamos altamente satisfechos sobre todo después de que como decía al principio ha sido el resultado de una acertada improvisación.   

Tiempo total que hemos dedicado a la ruta: 7 horas 20’
Desnivel acumulado de ascenso, unos  1.150 metros.
Kilómetros recorridos: unos 22 kms.
Climatología: Cielo con nubosidad parcial. Buena temperatura.
           


                                          Plano y referencias tomados del servicio IGN.


A continuación la muestra gráfica de la ruta,


Hemos salido del pueblo Eterna sin una idea muy clara sobre la ruta que podríamos desarrollar. De momento tomamos este camino para ir decidiendo sobre la marcha.

Seguimos la senda hacia la cabecera de esta vaguada y luego ya veremos.

Entre la vegetación existente contemplamos numerosos ejemplares de enebros y acebos como el bosque de la foto.



Nos situamos sobre el Portillo de Larrea desde donde podemos divisar una amplia extensión de terreno alcanzando a ver buena parte de la Sierra de la Demanda.

El pico Torocuervo que acerco con el zoom bien podría ser el objetivo del día.

Sorteando varias vaguadas tenemos que llegar a las proximidades del Alto de Pradilla.

Sobre los pastos de Pradilla.

Ermita de San Esteban en Pradilla.

Tras cruzar la carretera Pradoluengo-Ezcaray tomamos este camino que recorre la ladera Oeste del cordal que desciende de Torocuervo.

Vemos a nuestra derecha el pueblo Fresneda de la Sierra Tirón.

Valles y barrancos hacia el Oeste.

Buen camino que se abre paso entre el bosque de pinos.

En el collado de Iguareña vemos este refugio de cazadores.

Desde el collado continuamos por el cortafuegos que salvando un desnivel de 535 metros llega hasta la cumbre de Torocuervo.

Abajo queda el refugio de cazadores y collado de Iguareña al que hemos accedido por la parte izquierda del Alto de Corcusa que vemos en el centro de la foto. A la vuelta ascenderemos también esta elevación por la línea del cortafuegos.

La progresión por el largo cortafuegos además de exigente es monótona y poco atractiva. Pero bueno. Es lo que tenemos.




Tras una hora y 10’ de subida por el cortafuegos desde el collado, por fin llegamos a la cumbre de Torocuervo.


Foto testimonial en Torocuervo: Elías, Javier y la perra “Loba”.

Panorámicas desde Torocuervo. Hacia el Este vemos el pico San Lorenzo.

Mirando hacia el Sur vemos Campos Blancos y Otero.

Hacia el Oeste San Millán, Cabeza Aguilez, Trigazas y Remendía, con entremezcladas masas de bosque de pinos y de hayedo.


Hacia el Norte, por ahí escondido estará Eterna donde tenemos que volver.

Dejamos Torocuervo y regresamos por el mismo cortafuegos de subida hasta el collado de Iguareña.

Después del collado de Iguareña seguimos por el cortafuegos para regalarnos con la subida al Alto de Corcusa.

Buzón y placa del Alto de Corcusa.

Hacia el Este vemos el pueblo Valgañón.


Después de pasar Pradilla, para llegar a Eterna seguimos un itinerario ligeramente distinto al de primera hora.

Volvemos la mirada hacia atrás donde ya bastante alejado queda Torocuervo.

Separamos manualmente este rústico cercado que después de pasar volveremos a colocarlo en su misma posición.

Ya cerca de Eterna el camino pasa por el bosque de hayedo.




Me acerco hasta el promontorio en el que se encuentran los restos del edificio que fue parroquia de Eterna.

Aquí vemos la aislada torre del reloj y algunas de las pocas casas de Eterna.



Y esto es lo que ha dado de sí la improvisada excursión.