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01 de Agosto 2.005 (ir a etapa siguiente…)
Ibón de Arlet – Cabaña de Espelunguère.
Trazado en azul correspondiente al recorrido de la presente jornada.
Plano del IGN francés.
Vaya nochecita la que hemos tenido,
cobijados dentro de la tienda-vivac junto al lago de Arlet. Han estado pasando
qué sé yo cuántas tormentas una tras de otra con relámpagos y truenos,
descargando mucho agua incluso granizo y en momentos acompañado de fuerte
viento. Estamos bastante asustados pensando si nuestra débil tienda aguantará
todo este interminable vendaval y aguacero. Amanece y seguimos igual.
Retrasamos la hora de levantarnos, quietos dentro del diminuto habitáculo hasta
ver si esto termina. En alguno de los descansos de la tormenta aprovechamos
para desayunar. Pero no dura mucho y caen nuesvos aguaceros. Continuamos
quietos pensando a ver cómo evolucionará el tiempo.
Del refugio salen algunos
montañeros protegidos con el equipo de lluvia. Cuando parece que esto amaina un
poco, nos deja recoger y preparar las mochilas para ponernos a andar también
nosotros. La lluvia arrecia nuevamente cuando estamos de camino. Es tal la
abundancia de agua que la senda por la que caminamos se ha convertido en un
arroyo espontáneo. Los prados totalmente encharcados. Tras un chaparrón vuelve
otro. Así toda la mañana. Seguimos con mucha estoicidad teniendo ya la ropa
totalmente empapada pese a la capa protectora de la lluvia. Los pies dentro de
las botas parece que flotan en un charco de agua. Qué fuerte es todo
esto. Con tanta lluvia y entre la niebla como estamos, tampoco podemos ver
demasiado. Al menos la senda que seguimos es clara y se halla señalizada. Pasamos
cerca de varias cabañas que por lo que nos imaginamos se encontrarán ocupadas por
los pastores. Sabemos que nos encontramos por la Montagne de Banasse y que
atravesamos el col de Lapachouaou (1.891mts). Nos dirigimos hacia el bosque de
Espelunguère en dirección al Port de Bernera y el ibón de Astanés en la vertiente
española.
Las torrenteras
bajan muy cargadas con aguas turbias y resultan infranqueables. Seguimos el
camino pero no podemos pasar. Hemos de retroceder y buscar por donde cruzarle
evitando tener que meter las botas dentro del agua. Vemos que
hay varias sendas. Alguna de ellas lleva hacia el lago de Astanes. Nos
encontramos indecisos sobre qué dirección tomar. Quisiéramos encontrar una
cabaña que nos cobije y nos permita descansar y reponernos de la extraordinaria
calada que llevamos. Por arriba del valle llegamos a ver por fin a una cabaña
aunque con la duda de si la encontraremos abierta. Tenemos que salir de dudas.
No nos queda otra alternativa. Sería estupendo que estuviera disponible. Se
halla a la otra parte del torrente del valle que baja muy cargado de agua y no
encontramos paso para franquearle. Retrocedemos hasta encontrar una pasarela
que nos permita cruzar. Afortunadamente lo conseguimos y llegamos hasta la
cabaña de montaña de Espelunguère (1.416mts). Está abierta pero ocupada por el
grupo de 7 franceses que salieron del refugio de Arlet antes que nosotros.
Están haciendo tiempo a ver si pasan los chaparrones. Su intención es de
continuar la ruta hasta Candanchú donde tienen reservado alojamiento para la
próxima noche. Es un grupo que están haciendo recorrido de varias etapas, de
refugio en refugio, y por lo tanto con leve peso. Mucho más cómodos que de la
forma que viajamos nosotros.
Parece que cesa
la lluvia y los 7 montañeros nos dejan libre la cabaña para nosotros dos. Qué
afortunados después de lo que hemos pasado. Podemos calentar la estufa con leña
que hay al lado. De esta manera vamos secando todo lo que tenemos empapado. Ya
no nos movemos hasta que lo tengamos todo seco. Hasta mañana si nos sale mejor
día.
La ruta de hoy ha sido muy cortita pero emocionante.
Bajo la lluvia hemos caminado durante 3 horas y media. No ha habido desnivel de
subida apreciable. De bajada sí. Unos 600 metros.
A continuación una muestra gráfica de fotos:
Son las 8 de la mañana. La noche ha sido terrible. La tienda-vivac ha aguantado el fuerte temporal. Abriendo la cremallera vemos cómo se ha acumulado el granizo.
Un corto respiro. Salimos de la tienda y vemos el entorno. Al lado el lago de Arlet. Un poco más allá el refugio. Pero cuidado, que esto no ha terminado.
Decidimos prepararnos y salir cuando vemos pasar junto a nuestra tienda un grupo de montañeros protegidos con el equipo de lluvia. Pero todavía tenemos que aguantar varios chaparrones uno detrás de otro que terminan por empaparnos de arriba abajo y de fuera a dentro.
Nos encontramos por el entorno del bosque de Espelunguère. Ya sólo queremos encontrar una cabaña donde cobijarnos.
Ahhh!. Aquí está la cabaña. La fotografía está tomada mucho más tarde de cuando habíamos llegado. A estas horas ya parece que ha terminado todo lo malo. Podemos airearnos con confianza.
Y el interior de nuestro cobijo bajado del cielo. Vaya comodidad que hoy sí que agradecemos y necesitamos.
Se nos pegará el humo pero lograremos secar todas las pertenencias, incluso las botas!.
Ya no llueve pero la niebla tampoco termina por despejar.
Bueno, bueno. Esta jornada no se nos olvidará. El desplazamiento ha sido muy cortito. Lo damos por bueno. Después de todo tenemos que sentirnos muy satisfechos al poder disponer de este maravilloso cobijo y poder descansar con buena comodidad. Ya recuperaremos terreno si nos es posible en las posteriores etapas.
Hola Javi, que tal el verano?
ResponderEliminarVeo que sigues recordando esta " excursion por el piri " y yo leyendola con interés, aunque hace ya bastantes dias que no podia porque el ordenador ha estado en la emfermeria y ando liado con muchas cosas de todo tipo, en fin que si me descuido acabas con los relatos de esta actividad y yo sin darme cuenta.
Muchas de las fotos que pones ya se me habian olvidado y gusta volverlas a ver de nuevo ademas el texto muy bueno.... en fin a seguir con ello .
Un abrazo y ya nos veremos.
Gorbi.
Hola, Carlos. Recordar esta "nuestra" excursión por el piri me está entreteniendo bastante tiempo, casi tanto como cuando andábamos por alli... Pero bueno. Que si además de trabajarlo yo, también tú te entretienes un poco en recordarlo... y otros muchos que también pueden tener interés en seguirlo... pues doy por bueno el trabajo. Hay para largo hasta acabar todo el itinerario... Ahora recordándolo podemos darnos cuenta de que sí fué "un reto muy atractivo".
ResponderEliminarTe espero algún día donde en esta época ya sabes que puedes encontrarme.
Javi
Hola Javi ¡
ResponderEliminarVaya etapa pasada por agua ¡¡. Y que suerte el encontrar esa estupenda cabaña ¡¡.
A mi me ha entrado el "gusanillo" del "piri" y probablemente el jueves vayamos Noelia y yo a subir el Taillón desde Gabarnie y también pasemos unos días por el sur de Francia. Su hermana esta de voluntariado en Pau y iremos a visitarla.
Si el miercoles por la tarde estais en los Tomillares y podemos pasar a haceros una rápida visita...
Un saludo:
Kike
Hola, Kike. Fué un día difícil pero en medio de todo lo llevamos muy bien. Luego tuvimos la gran suerte de encontrar esa estupenda cabaña para recuperarnos de la "gran mojada". En el Pirineo no se pueden descartar que nos pillen tormentas. El verano es muy propicio para ello. Pero hay que llevarlo con buen ánimo y preparados mentalmente a que te pillen algunos chaparrones. El agua es un aliciente más en este Gran Recorrido. Ánimo, y que disfrutéis vosotros también por ahí en Gavarnie. Más adelante verás que nuestra ARP también pasó por Gavarnie aunque no subimos Taillón... Pero cerca, cerca.
ResponderEliminarJavi