viernes, 15 de noviembre de 2013

194 – Cabeza Aguilez por el Nacedero.



Ruta realizada en fecha 12 de Noviembre de 2.013

Itinerario:
Pradoluengo…… Refugio La Pasada – El Nacedero – Remendía – Mojón Alto – Cabeza Aguilez – Mojón Alto –  El Acebal – Refugio La Pasada.

                                                   Por el hayedo del Nacedero. (Pradoluengo)


                                                      Ubicación de la ruta.


Elías y Javier.


            El punto de partida para la ruta de hoy le tenemos junto al refugio y área recreativa La Pasada (1.055mts) ubicado en la confluencia de los valles que forman los arroyos del Acebal y de Oropesa. Se accede a este lugar siguiendo la pista que sale de la población de  Pradoluengo hacia el Sur, tras un desplazamiento de dos kilómetros.
            Tomamos el camino que remonta el valle del arroyo Oropesa (el mapa también le denomina Pradoluengo) y siguiendo las marcas del bien señalizado PR BU-59 que discurre entre el entretenido bosque de pinos y hayedo llegamos hasta el denominado “Nacedero del Oropesa” (1.358mts). A partir de este punto ya no existe camino alguno pero sí las marcas blancas y amarillas del PR que entre el mismo bosque continuando en dirección Sur, siguiéndolas nos llevan a remontar la ladera. Llega un momento en el que estas marcas tienden a descender dirigiéndose hacia el Oeste, suponemos que en itinerario hacia la fuente de Berrungaña y Cruz de Guirlando, por lo que decidimos ignorarlas ya que nuestra intención es de seguir remontando hacia la cota Remendía.
            Así pues, no siendo obstáculo para nosotros la ascensión entre el hayedo, vamos ganando altura hasta pasar el límite del bosque y coincidir con el cortafuegos abierto sobre el lomo que desciende de Remendía hacia Las Rasadas y Cruz de Guirlando.
            El día que hemos escogido para la ruta no ha salido nada radiante. Progresando entre el bosque que ya acabamos de dejar atrás, más bien parecía que llovía dada la cantidad de humedad de ambiente motivado por la niebla. El suelo también está cargado de mucha humedad con lo que el calzado y los bajos de los pantalones los tenemos totalmente empapados. En cuanto a visibilidad, una vez hemos cogido altura la niebla no nos permite distinguir más allá de 100/150 metros. Pero a pesar de ello no disminuye el ánimo para continuar en nuestro propósito hasta ascender primeramente la cota de Remendía (1.838mts) que ya se encuentra bastante próxima.
            Tenemos suficientemente reconocida la Sierra y aunque en estos momentos carezcamos de visibilidad, una vez alcanzado Remendía  tampoco será problema continuar por el cordal hacia Cabeza Aguilez. Para llegar a este objetivo pasamos por Mojón Alto (1.878mts), luego el collado de Aizola (1.856mts) y finalmente logramos situarnos sobre el punto culminante de la ruta, la cota de Cabeza Aguilez (2.033mts).
            En condiciones normales nos entretendríamos un ratillo disfrutando de la cumbre como ya hemos hecho en otras muchas ocasiones. Hacia el Oeste se encuentran el pico San Millán y Trigazas mientras que hacia el Este entre otras muchas elevaciones tendríamos que divisar las cumbres de Otero y San Lorenzo. Pero no. Hoy la niebla no nos permite ver absolutamente nada. También es intenso el fuerte viento sobre la cima. Sería difícil explicar y dar a entender el porqué nos hemos empeñado en alargar la ruta llegando hasta aquí dadas las condiciones ambientales de escasa visibilidad, cuando lo más razonable parece que hubiera sido dar vuelta atrás desde Remendía. Pero conociendo estas montañas no teníamos ningún problema de orientación y el hecho de subir una vez más a Cabeza Aguilez tenía para nosotros suficiente motivación que no queríamos desestimar.
            Conseguido el objetivo propuesto nos volvemos por donde hemos venido de regreso a Remendía. Situados sobre el collado previo a Remendía  donde confluyen cortafuegos y otros caminos evitamos la subida de nuevo a esta cota y seguimos por el camino que hacia el Este nos conduce en dirección a Cerro Estrecho. Sin alcanzar tampoco esta nueva cota nos desviamos hacia el Norte descendiendo por el cortafuegos que nos lleva a enlazar con el camino del Acebal que ya no abandonaremos hasta finalizar en La Pasada.
           A pesar de la niebla disfrutamos de este largo tramo de buen camino resultando sumamente agradable, primero entre bosque de pinos y luego hayedo en el que se intercalan numerosos ejemplares de acebo y serbales con la gama de colorido que nos ofrece la época otoñal en la que estamos. Una bonita manera de completar el recorrido de hoy, que pese a no haber gozado de óptimas condiciones ambientales nos quedamos con lo positivo que nos ha ofrecido la ruta de la que terminamos suficientemente satisfechos.


Tiempo total que hemos dedicado a la ruta: 6 horas 20’
Desnivel acumulado de ascenso, unos  1.100 metros.
Distancia recorrida: unos 18,150 kms.
Climatología: Cielo cubierto. Espesa niebla en altura, Viento en el cordal. Mucha humedad. Temperatura fresca.


Otras entradas en este blog con referencia a Cabeza Aguilez:


                                         Plano y referencias tomados del servicio IGN.


Reportaje gráfico de la ruta:


Iniciamos la ruta en el área recreativa La Pasada, a la que hemos accedido por la pista que sale de Pradoluengo siguiendo el curso del valle del arroyo Pradoluengo.
Elías se entretiene observando la placa con referencias a la industria textil existente en el valle en tiempos pasados.


En principio seguiremos la ruta señalizada que nos hará pasar por el “Nacedero del río Oropesa”.

Este es el valle del Oropesa con bosque de pinos y hayedo.


Cuando llevamos caminando cerca de 30’, la ruta se desvía hacia la izquierda con un ligero descenso hasta la base del torrente.

Disfrutamos con el colorido que nos ofrece la época otoñal.

El camino entre el bosque sigue siendo cómodo y agradable.


Nos sorprende junto al camino este conjunto con figuritas que forman el típico “Belén” navideño. Parece que se mantiene en estado “permanente” en ambiente natural sin importar la época en la que estemos.

Seguimos el agradable paseo entre el hayedo.

La perra “Deva” que hoy nos acompaña, aunque en todo momento mantenga la lengua fuera está sumamente feliz con el paseo.

En algo más de una hora desde inicio de la ruta llegamos al “Nacedero del Oropesa” cuyo manantial se agradecerá aún más en época de calor, que hoy no es el caso.

A partir del “Nacedero” ya no sigue el camino, pero sí las marcas de PR en la ladera de bosque.

Pero llega un momento en el que las marcas siguen una trayectoria distinta a nuestras intenciones. Por ello dejamos de seguirlas y continuamos la ascensión sin mayor problema salvo la fuerte inclinación que presenta la ladera.

Salimos del bosque y atravesamos una estrecha franja de matorral donde se ha fijado la humedad de la niebla. No llueve pero quedamos empapados de agua.

Ahora ya progresamos por el cortafuegos en dirección ascendente a la cota de Remendía.


Entre la niebla dejamos atrás Remendía y continuamos por el mismo cortafuegos siguiendo el cordal que nos llevará hasta Cabeza Aguilez.

En el trayecto pasamos por Mojón Alto.

Seguir por el cordal no resulta demasiado complicado pese a que la niebla nos impida ver más allá de 100 mts.

En estas condiciones alcanzamos la cota de Cabeza Aguilez.

Foto testimonial en Cabeza Aguilez que refleja en parte las condiciones un tanto adversas. A la nula visibilidad hay que añadir el fuerte viento y el frío que soportamos.

Al no poder disfrutar como es el caso en la mayoría de las ascensiones, no nos entretenemos y regresamos por donde hemos venido.

Nuevamente pasamos por Mojón Alto.

En el collado previo a Remendía confluyen cortafuegos y varios caminos. Descartamos nueva subida a esta cota y tomamos el camino que deriva a la derecha en dirección a Cerro Estrecho para luego descender por el “Acebal”.

El camino se abre paso entre bosque de pinos.

Hemos llegado a la confluencia del cortafuegos que baja de Remendía por el que seguimos unos metros y antes de Cerro Estrecho tomamos el desvío también de cortafuegos que desciende hacia Tocaldía.

Aquí dejamos el cortafuegos de bajada y seguimos por el camino de la derecha que nos introduce en el monte del Acebal.


Setas al pié del camino.

Aunque persista la niebla, llegamos a disfrutar en este camino por el bosque de hayedo en el que también proliferan numerosos ejemplares de acebo y serbales.


Los frutos del serbal.




Ya vemos abajo el valle de Pradoluengo con el área recreativa y refugio La Pasada donde hemos comenzado la ruta y ahora la vamos a concluir.

La localidad de Pradoluengo se ha distinguido por diversas industrias familiares de hilatura y concretamente en este valle del río Pradoluengo se pueden ver algunos edificios como el de la imagen y la placa con leyenda alusiva a esta industria.

4 comentarios:

  1. La estación otoñal en la que nos encontramos le confiere a nuestros bosques un encanto especial que permite disfrutar de paseos como el que nos relatas, aunque las condiciones climatológicas no sean las más propicias.
    El simple hecho de avanzar sobre el manto de hojas y entre las tortuosas ramas de las hayas salpicadas de vivas tonalidades de los frutos de acebos y serbales, es un lujo para los sentidos; aún la niebla, confiere un toque añadido de incertidumbre al entorno aunque no permita sacar las fotos con los coloridos que uno quisiera, pero... no van a ser todo rutas de sol radiante, ¿no?
    Recorrido bien aprovechado, Javier... porque seguramente hoy mismo, los colores del otoño se estén tornando blancos.
    Un saludo de 'Ojolince y Sra.'

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    1. Estamos de acuerdo, Juan Miguel y Tere. El otoño es una estación muy singular y algo ya hemos aprovechado con algunas rutas en las que hemos disfrutado de las tonalidades de colores y ambientes espectaculares. Incluso días como este que no invitaban a salir al monte, a nosotros no nos faltó entusiasmo para aprovecharle en el ámbito que tanto nos apasiona.
      Por lo que estamos viendo ahora mismo, parece que de aquí en adelante ya empezaremos a convinar colores con el blanco de la nieve. Bienvenida sea la nieve a la montaña y a ver si también conseguimos sacarla buen partido.
      Un abrazo,
      Javier

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  2. Hola Javier, espectaculares vistas de la estación Otoñal,hemos estado esta finde en Cazorla y he disfrutado como un niño con el paisaje.Cuantas fotos no sabias donde acudir para poder fotografiar
    nunca había visto estos paisajes.Saludos.

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    1. Me alegro Juan Carlos de tu paseo por Cazorla disfrutando de los bonitos paisajes otoñales. Te deseo que revivas muchos años esta estación con lo que nos ofrece por los bosques. Como te ha gustado tanto, seguro que repetirás experiencia.
      Un saludo,
      Javier

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