Ruta realizada en fecha 27 de Octubre de 2.013
Itinerario:
Eterna (pueblo) – Pradilla (Alto de
Pradilla) – Collado de Iguareña – Torocuervo – Collado de Iguareña – Alto de
Corcusa – Pradilla (Alto de Pradilla) – Eterna.
Los protagonistas de la ruta en la cumbre de Torocuervo (1.933mts).
Ubicación de la ruta.
Elías y Javier.
La ruta de
hoy va a ser una improvisación después de acercarnos al pueblo de Eterna, a
donde accedemos una vez pasado Belorado en la N-120 y tomar el desvío que hacia el Sur pasa por
las localidades de Fresneña y San Cristóbal del Monte para terminar en el
mencionado Eterna (1.110mts) donde finaliza el asfalto.
Sobre la
marcha iremos decidiendo recorrido y objetivo después de haber comenzado a
caminar pasadas las 10 de la mañana (teniendo en cuenta el cambio de horario de
final de Octubre). En clara dirección Sur seguimos por un camino en principio ancho
que a los pocos minutos se convierte en estrecha senda. Entre la vegetación
existente podemos contemplar ejemplares de enebro y numerosos acebos destacando
la vistosidad de éstos últimos especialmente cuando alcanzamos el Portillo de
Larrea (1.240mts) y los más despejados campos de la Dehesa. Es desde esta posición
cuando se nos abre un amplio horizonte teniendo bien a la vista el cordal de la Sierra de la Demanda. Fijamos
nuestra mirada especialmente en la montaña Torocuervo que bien podría ser un
interesante objetivo. Se encuentra bastante lejos pero pensamos que sería
asequible. Nos moveremos en esa dirección.
En las
dehesas antes de llegar al Alto de Pradilla divisamos un numeroso rebaño de
ovejas que se encuentran apaciblemente pastando. El mastín que las
protege se aproxima hacia nosotros obligándonos a modificar nuestra
trayectoria. Para evitar el encuentro con el fiero guardián que sigue
acosándonos a cierta distancia, realizamos algunos rodeos salvando suaves vaguadas hasta llegar a
Pradilla (1.188mts) en cuyo entorno contemplamos la ermita de San Esteban.
Tras cruzar
y dejando a nuestra espalda la carretera BU-811 (Pradoluengo – Ezcaray) continuamos
dirección Sur por el camino que recorre la ladera Oeste del cordal que
desciende del Torocuervo hasta Pradilla. Con vistas al valle del río Tirón y el
pueblo de Fresneda de la
Sierra Tirón que quedan a la derecha de nuestra marcha vamos librando
las cabeceras de los barrancos del Agua Sal, de Gutia y posteriormente de
Montelacelda De esta manera en suave
pero largo desplazamiento alcanzamos el collado de Iguareña (1.398mts) donde se
encuentra un refugio de cazadores.
Estando
sobre el collado ya no tenemos escusa para animarnos a continuar la ascensión a Torocuervo. Bien es cierto que la subida de los 535 mts de desnivel
desde el collado, además de exigente no va a resultar muy amena pues el
itinerario no es otro que un monótono cortafuegos que se abre paso por el lomo,
separando y dejando a uno y otro lado las masas boscosas de pino hasta prácticamente
la cima de Torocuervo. Se suceden tramos de acentuada pendiente y breves trechos
de menor inclinación. Pero nos saldremos con la nuestra a base de esfuerzo y voluntad. Poco a poco vamos ganando metros a la
pendiente tomando de vez en cuando cortos respiros de recuperación sin llegar a perder de vista en todo momento el collado y refugio por el que hemos pasado momentos antes.
También nos fijamos en los valles contiguos, teniendo a la derecha de nuestra marcha
los de Montelacelda y Montelaszarras que confluyen en el principal del río
Tirón, mientras que a la izquierda es el del río Ciloria que desciende hacia los
pueblos Valgañón y Ezcaray.
Desaparece
la vegetación, los pinos quedan atrás y finalmente pisamos la cumbre de
Torocuervo (1.933mts) que se halla sobre una aglomeración de pedregal. Situados junto al
buzón y placa de cumbre se nos ofrecen amplias panorámicas
identificando buena parte de montañas de la Sierra de la Demanda, entre las que destacan las cumbres de San Lorenzo,
Campos Blancos, Otero, Cabeza Aguilez, San Millán, Trigaza… Bien, bien. El
cielo está algo brumoso y no se definen muy claramente las panorámicas hacia el
horizonte. No obstante sí que logramos identificar en la lejanía las siluetas
del monte Gorbea y del Anboto así como de la Sierra de Aizkorri por donde nos movíamos 7
días antes.
Agotado el tiempo del
merecido y necesario descanso, emprendemos la bajada hacia el collado de Iguareña por
el mismo cortafuegos de subida. Luego queremos variar un poco el itinerario
conocido y nos armamos de valor para ascender algo más de 100 mts extra
siguiendo la línea del mismo cortafuegos que nos sitúa en el Alto de Corcusa
(1.514 mts). Con esto ya descendemos hacia Pradilla previo paso por el collado
de los Cargadores (1.317mts).
Tomamos el
camino hacia Eterna y de nuevo nos topamos con los guardianes de los rebaños.
Ahora son 4 los mastines que vienen a nuestro encuentro, algunos de ellos
cachorros aprendiendo de sus progenitores las eficaces maneras de atemorizar a los
intrusos sin amilanarse ante nuestras amenazas ni lanzamiento de alguna
que otra piedra. Solo cesan su acoso después de poner tierra por medio estando ya un tanto alejados
de los rebaños que protegen. Todavía pasamos junto a otro de los guardianes,
agazapado en este caso entre el matorral. Nos quedamos sorprendidos de que ahora el
animal ni se inmuta ante nuestra cercana presencia.
El camino
por el que vamos de regreso, ya casi a las puertas de Eterna nos lleva a pasar por
un atractivo hayedo cuya travesía resulta amena. Una bonita manera de finalizar
la ruta de hoy de la que quedamos altamente satisfechos sobre todo después de que
como decía al principio ha sido el resultado de una acertada
improvisación.
Tiempo total que hemos dedicado a la ruta: 7 horas 20’
Desnivel acumulado de ascenso, unos 1.150 metros.
Kilómetros recorridos: unos 22 kms.
Climatología: Cielo con nubosidad parcial. Buena
temperatura.
Plano y referencias tomados del servicio IGN.
A continuación la muestra gráfica de la ruta,
Hemos salido del pueblo Eterna sin una idea muy clara sobre
la ruta que podríamos desarrollar. De momento tomamos este camino para ir
decidiendo sobre la marcha.
Entre la vegetación existente contemplamos numerosos
ejemplares de enebros y acebos como el bosque de la foto.
Nos situamos sobre el Portillo de Larrea desde donde podemos divisar una amplia extensión de terreno alcanzando a ver buena parte de la Sierra de la Demanda.
Tras cruzar la carretera Pradoluengo-Ezcaray tomamos este
camino que recorre la ladera Oeste del cordal que desciende de Torocuervo.
Desde el collado continuamos por el cortafuegos que salvando un desnivel de 535 metros llega hasta la cumbre de Torocuervo.
Abajo queda el refugio de cazadores y collado de Iguareña al
que hemos accedido por la parte izquierda del Alto de Corcusa que vemos en el
centro de la foto. A la vuelta ascenderemos también esta elevación por la línea del
cortafuegos.
La progresión por el largo cortafuegos además de exigente es
monótona y poco atractiva. Pero bueno. Es lo que tenemos.
Tras una hora y 10’
de subida por el cortafuegos desde el collado, por fin llegamos a la cumbre de Torocuervo.
Hacia el Oeste San Millán, Cabeza Aguilez, Trigazas y Remendía, con entremezcladas masas de bosque de pinos y de hayedo.
Después del collado de Iguareña seguimos por el cortafuegos
para regalarnos con la subida al Alto de Corcusa.
Después de pasar Pradilla, para llegar a Eterna seguimos un
itinerario ligeramente distinto al de primera hora.
Separamos manualmente este rústico cercado que después de
pasar volveremos a colocarlo en su misma posición.
Me acerco hasta el promontorio en el que se encuentran los restos del edificio que fue parroquia
de Eterna.
Y esto es lo que ha dado de sí la improvisada excursión.